Por Felipe López
Nezahualcóyotl, Méx.- Con dos balazos en la cabeza fue localizado el cadáver de Rodolfo Hernández Espirocueta, de 38 años, quien se desempeñaba como teniente de la fuerza aérea mexicana, al parecer el crimen está vinculado con el robo de una camioneta propiedad del hoy occiso.
El crimen del militar se registró frente al número 115 de la calle Lázaro Cárdenas, colonia Manantiales, lugar donde fue localizado un casquillo percutido calibre 38 súper, informó la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SAC).
Los criminales interceptaron a su víctima que viajaba acompañado de su mujer a bordo de una camioneta de la marca Ford, modelo 2006, placas de circulación MBE 8995 del estado de México, presuntamente salía de su casa ubicada en la calle 37, número 192, de la colonia Las Águilas, dijo la dependencia.
El militar presentaba dos lesiones producidas por disparo de arma de fuego en cuello y nuca.
Los criminales tripulaban una camioneta de color negro a la que subieron por la fuerza a la pareja del castrense, privándola de su libertad por espacio de 20 minutos.
El cuerpo del infortunado fue identificado por uno de sus familiares de nombre Sergio León quien dijo que su cuñado se desempeñaba como piloto aviador con el grado de teniente en la base aérea de Santa Lucía, en el municipio de Tecámac.
Una vez que ultimaron de dos balazos a su víctima se llevaron la camioneta con dirección a la unidad habitacional Ermita Zaragoza, delegación Iztapalapa, al parecer eran seis sujetos los criminales.
En tanto que la mujer de 35 años de edad -esposa del militar- abandonaron más tarde en calle Tenochtiltlán de la unidad habitacional Rey Neza, municipio de Nezahualcóyotl.
Hasta el momento no se ha podido dar con el paradero de la camioneta, propiedad del hoy extinto, informó la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) quien a través de la Fiscalía de homicidios investigan el caso.
Al lugar de los hechos acudió el agente del Ministerio Público, Benito Zarza Ocaña, de la Fiscalía de homicidios para realizar la inspección ocular y ordenar el levantamiento del cadáver para su envió al servicio médico forense para la práctica de la necropsia de ley.
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